Tránsantiago
He visto dos grandes transformaciones en el sistema de transporte público en Santiago de Chile. Hasta mi adolescencia las micros (autobuses) eran de colores, estos diferenciaban los distintos recorridos por la ciudad, con decorados interiores personalizados y pintorescos estilos. De las micros de colores con nombres propios, fáciles de distinguir por sus particularidades y llamativos colores pasamos a la uniformidad de las popularmente llamadas “micros amarillas” en 1991.
Estos cambios causaron confusión por las modificaciones de los nombres y números de los buses. Se perdió el color y con ello cambió el paisaje cromático urbano. En el año 2007 hubo una nueva transformación llamada Transantiago. Abandonamos el uniforme amarillo por nuevos destinos, recorridos y seis nuevos colores que distinguen las zonas de circulación. Un nuevo cambio del sistema de transporte de la capital, que busca soluciones para una población cada vez más numerosa. Problemas propios de las grandes urbes centralizadas, con una explosión demográfica importante a lo que se suma la migración, producto de la necesidad y la globalización. Un nuevo desafío para el sistema.
Este trabajo es un testimonio del último periodo, donde los protagonistas son los usuarios, los buses y la atmósfera propia del Santiago que suelo recorrer. Siempre me he hecho la misma pregunta con respecto a las personas. ¿Quiénes son, de dónde vienen y hacia dónde van? Distintos recorridos, diferentes destinos.
2009-2019